fbpx

EL DÍA MUNDIAL DEL AGUA

ESCRIBE: OSWALDO HIDALGO SOLÍS

En la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo efectuada en Río de Janeiro, Brasil del 3 al 14 de junio de 1992, se acordó que el 22 de marzo se celebre “el día mundial del agua”.  El 2017, la Asamblea General de las Naciones Unidas acordó designar al período 2018 – 2028 como el “Decenio del agua”. Por otro lado, los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU, que están en vigencia entre 2016 y 2030, tiene como objetivo 6: “agua limpia y saneamiento para todos”. Todos estos acuerdos de la ONU ponen de manifiesto la importancia del recurso hídrico para la vida del planeta Tierra. Si bien es cierto, el 70% de la superficie del planeta es agua, sólo el 3% es agua dulce y la mayoría, está congelada.

La escasez de agua dulce en el planeta Tierra es realmente preocupante. Es un problema que afecta a 2400 millones de personas en los 5 continentes, es decir a cerca de la tercera parte de la población mundial. Las principales causas de la escasez de agua son: (1) la contaminación de las fuentes, (2) el mal uso del recurso y (3) las sequías. La principal consecuencia de esta escasez son las enfermedades en seres humanos y la muerte de animales y plantas. A medida que avanzaba el siglo XX, el consumo de agua potable se empezó a duplicar cada 20 años. Se estima que actualmente, casi tres 3000 millones de personas no tienen como lavarse las manos contra el coronavirus[1].   

La Teoría de la Unión de los 5 Continentes (TU5C) tiene entre sus principios: la persona, la familia, vivienda, salud, educación, alimentación y trabajo. Sin agua no hay alimentación ni salud. En realidad, sin agua no hay vida. La única manera de asegurar el abastecimiento de agua de manera sostenible en el planeta Tierra, es mediante un acuerdo intercontinental sobre el cuidado de las fuentes y la calidad de su uso.   Algunos países han tenido que recurrir a desalinizar agua de mar para poder satisfacer las necesidades de agua dulce de sus poblaciones. El avance de la ciencia y la tecnología está logrando que este proceso industrial sea cada vez menos costoso, no obstante, cada año se vierten más 8 millones de toneladas de plástico al mar.

El problema radica en que ningún país quiere asumir los costos de contribuir a limpiar el mar.  La reunión de la ONU en Nairobi a finales de 2017, con la finalidad de limpiar los mares del plástico, no ha tenido el resultado que se esperaba ya que no sanciona la producción de plástico y el acuerdo adoptado no es vinculante. La TU5C propone una nueva forma abordar el problema de la escasez de agua en un único plan de gobierno intercontinental, que será el fruto de la interacción de 5 presidentes (uno por cada continente) con un comité de trabajo designado por una comisión de selección de la ONU. El comité estará conformado por las mentes más brillantes del planeta en este tema. Dado que el tratamiento a este problema será más científico que político, es posible superar sosteniblemente la escasez de agua dulce que actualmente tenemos.

 

[1] https://www.un.org/es/observances/water-day